Ilusión a la vista

-¿Ilusión a la vista?

-Ilusión a la vista.

-¿Qué es lo que te hace tanta ilusión?

-Todo en sí.

-Pero quiero saber, Tina.

-¿El qué?

-El porqué de esto. ¿Qué es lo que te hace o te haría ilusion?

-Me haría ilusión que la gente leyera.

-¿Leyera qué?

-Pues ésto.

-¡¿Ésto qué?!

Tina se levantó, se acercó al escritorio y cogió un cuaderno. Era un diario en verdad, era azul y había una muñeca en el medio. Estaba en las nuebes, como Tina, siempre está soñando.

-Ainoha, ¿te he dicho alguna vez que la gente piensa que estás loca? Yo también lo pienso. -Dijo mientras Ainoha empezaba a leer:

"Hay gente que piensa que Ainoha está loca, que su trastorno va más allá de la realidad. Yo pienso que es cierto, que su locura se refugia en otro lugar, un lugar que ninguno de nosotros podemos encontrar, con un significado que no podemos descifrar, como un código secreto, así es su mente."

-Pues que sepas que estás tu más loca.

Tina rió, y le dió un beso en la mejilla. Un beso corto.

-Pero que tontería, a lo mejor por igual, ¿pero yo más? Que va.

-¿Ésto es lo que te hacía tanta ilusión?

Asintió. Ainoha sonrió ligeramente con dulzura, y "Locura".

-¿Te quedarás a mi lado Tina?

-Claro.

-¿Aun que esté loca?

-¡Siempre!